miércoles, 11 de septiembre de 2013

Reforma Incendiaria.



Es perfectamente entendible que ante tantos movimientos, propuestas, declaraciones, etc. estemos bombardeados no sólo de información, sino de opiniones. Lo que no alcanzo a entender (del todo) es la tendencia a radicalizarse sin mayor conocimiento o reflexión. He de confesar que no puedo evitar cierta frustración ante esta mezcla de disparates, razones, extremismos y análisis, y tal vez resulte irónico que precisamente me una al revoltijo. Mi intención es al menos, desde lo limitado de mis experiencias y consideraciones, invitar a una lectura más consciente y la formulación de opiniones con más sustancia. El tema al que me referiré es la propuesta de Reforma Hacendaria.

¿Conocemos realmente la situación de los impuestos y recaudación en México? Los impuestos desde el mismo nombre tienden a causarnos una reacción negativa, cierto, pero como miembros de una sociedad con cierta educación en teoría entendemos que los impuestos son necesarios para mantener los servicios públicos básicos. ¿Tu, pagas impuestos? Independientemente del régimen fiscal si formamos parte de la población económicamente activa deberíamos de cumplir con el pago de nuestros impuestos. Argumentos como “las empresas grandes no pagan”, “no pagaré impuestos porque se lo gastan en cosas que no me parecen”, pierden total validez si en primer lugar no se ha cumplido con lo que como contribuyente nos corresponde y en segundo si no se ha manifestado el desacuerdo en cuanto a los destinos del presupuesto. Por ejemplo, si no estamos enterados como empleados de cómo paga la empresa que nos emplea, al menos en cuanto a lo que nuestro sueldo se refiere. Además hay varios impuestos que ni siquiera sentimos o hacemos conscientes, como el IVA cuando uno va al súper, o a la papelería, o a la ferretería. Los servicios de telefonía celular o local que pagas también lo tienen. ¿Cada vez que pagas contabilizas el monto que corresponde a IVA?

¿Sabías que el SAT reportó como logro en el primer semestre 2013 la ampliación de la base de contribuyentes activos? Se informa que se compone de 39.48 millones de contribuyentes, mayoritariamente asalariados. De acuerdo al último Censo de Población y Vivienda el INEGI reporta un total de 112 336 538 mexicanos. Si consideramos que a partir de los 25 años tendrías que ser activo económicamente y que a partir de los 65 dejas de serlo; entonces 50,566,040.00 personas deberían ser contribuyentes activos. Claro que la base a la que se refiere el SAT no es solo de personas, sino de compañías. Imagina que cada anuncio de la Sección Amarilla correspondiera a una empresa. ¿Empieza a ser más clara la situación? Agreguemos al escenario la evidente tendencia a “pagar menos” o “evadir”, con lo que podríamos concluir diciendo que los pocos que pagan poco pagan.

Vayamos ahora a la Incendiaria Reforma Hacendaria, y para hacerlo me referiré a los puntos de la nota de CNN: 20 cosas que no sabías de la reforma fiscal propuesta por Peña Nieto.

IVA sobre Mascotas y sus alimentos:

¿Cuándo fue la última vez que tú o alguien que conozcas compró un perro, gato o perico? Si buscas en Mercado Libre podrías encontrar perros hasta de $ 18,500. A mi muy personal parecer si compras un perro de ese precio “reflejas capacidad contributiva”. Que quede claro, no pagas impuestos sobre las mascotas que tengas, sino sobre la compra. Se habla tanto de los derechos de los animales, responsabilidad de que esterilices a tu mascota, adoptar en vez de comprar. Entonces ¿no podría ser esto también un incentivo a que se adopte? Esto obviamente beneficiará a los refugios. Estos refugios precisamente suelen ser sin fines de lucro, y financiarse con donaciones tanto de personas como instituciones y empresas. Por eso me sorprendió encontrarme con la afirmación que los más afectados de aprobarse el IVA para alimentos de mascota serían estos refugios y protectores. Es cierto, para ellos y para muchos tener una mascota no es un lujo, ya que son organizaciones sin fines de lucro. ¿Sabías que a las organizaciones sin fines de lucro les correspondería un régimen fiscal especial en el que podrían no pagar impuestos? Es decir que si están constituidas legalmente y cumplen con una serie de obligaciones fiscales se pueden considerar no contribuyentes del ISR. Además cumpliendo con algunos otros requisitos se pueden volver donatarias autorizadas, lo que les permite recibir donativos de diferentes compañías y personas para seguir realizando su actividad, y emitir recibos de dichos donativos que se consideran deducibles para efectos fiscales de las personas que los otorguen. Me pregunto si la mayoría de los refugios están constituidos de alguna manera y mantienen una administración interna acorde que les permita acceder a estos beneficios. Me pregunto también si tanta gente que puede ‘apoyar’ con un #Hashtag estaría dispuesta, por consciencia y humanidad, a donar para apoyar estas organizaciones y disminuir el impacto que tendría en ellos la reforma.

IVA sobre Venta y Renta de Casas

La declaración Universal de Derechos humanos en su art. 25 menciona que toda persona tiene derecho a la vivienda como elemento de un nivel de vida adecuado. También la Constitución Mexicana dicta en el art. 4º que “toda familia tiene derecho a disfrutar de vivienda digna y decorosa. La ley establecerá los instrumentos y apoyos necesarios a fin de alcanzar tal objetivo.” Me parece que adicionar el 16% a la renta o compra de una vivienda es todo lo contrario. ¿Cuál es el incentivo a formar un patrimonio si por ejemplo, estás rentando una casa y tendrás que pagar el 16% más de alquiler y si para comprar una pagarás el 16% más del total además del 16% más de los intereses que pagarías en cada mensualidad? ¿Cuál es el argumento? Se supone que es impuesto al Valor agregado y a mi parecer el valor agregado de una casa lo pone precisamente su ocupante. Y contradiciendo precisamente aquello de “capacidad contributiva”, lo más natural es querer tener un techo bajo el cual vivir, ¿o terminará siendo más conveniente volverse paracaidista o iniciar un asentamiento irregular? Debo preguntar también ¿Sabes que los intereses hipotecarios son deducibles y que si presentas la declaración anual te los deben de regresar?

Jugar a la Bolsa

Invertir en la bolsa me parece una mezcla de análisis, instinto y azar. Las tendencias pueden cambiar a partir de rumores, las ganancias dependen de momentos críticos en la toma de decisiones, en fin. Encuentro varias similitudes con cualquier juego de póquer. Se supone que para ganar un buen monto tendrías que invertir también una cantidad considerable. Digamos que tienes un millón en acciones que valen 2 pesos cada una y el valor de esas acciones se incrementa 50 centavos: ganarías 250,000 pesos y seguramente estarías muy feliz. Pero si bajan de valor esos mismos 50 centavos el efecto es el contrario. Considera que una acción de Alsea varió en un día de 33.50 a 35.80. ¿Cuánto tendrías que haber invertido para ganarte esos 250,000? ¿o debo de decir “jugado”? Mi muy personal opinión es que si alguien tiene suficiente dinero para arriesgarse de esa manera no debería sentirse tan afectado por pagar 10% sobre sus ganancias, casi equiparable a cuando los que ganan la lotería pagan sus impuestos correspondientes.

Conciertos de Rock y espectáculos públicos.

“Al pueblo pan y circo. Y teatro, pero ni se les ocurra hablar de rock.” Sí que los romanos debían de estar locos. ¿A qué espectáculos públicos se refiere la reforma? Honestamente no me queda claro, especialmente por la distinción contra el teatro y el circo (éste último pobremente regulado y tan criticable). Con un país con tanta falta de apoyo a las artes y todo tipo de cultura, ¿es necesario empezar a categorizar, diferenciar e incrementar el costo a los asistentes? Me parece una propuesta criticable, especialmente porque seguramente los grandes consorcios que organizan grandes eventos están constituidos y podrían acreditar el IVA cobrado sin que necesariamente se refleje en la recaudación.

Empresas grandes y chiquitas.

Soy una firme promotora del emprendedurismo, de encontrar formas propias de ganarse la vida, generar empleos, tener mejores propuestas en productos y servicios. Pero hay que aceptar que no es lo más sencillo iniciar y muchos micronegocios arrancan sin estar bien constituidos o dados de alta, es decir, sin pagar impuestos. Los tacos de la esquina, los tamales y muchos otros “puestos” en los que puedas pensar muy probablemente no pagan impuestos. Para aquellos que quisieran iniciar con un poco más de orden existe el régimen conocido como Repeco (Régimen del pequeño contribuyente) que permite pagar una cuota limitada. Esto puede ser inequitativo con otros negocios, pero es al menos un incentivo a darse de alta. Si como la reforma hacendaria propone este régimen desaparece por una parte se equiparan las reglas, y por otra seguirá siendo más atractivo quedarse en la informalidad. ¿Cuál es el efecto positivo entonces? Habría que analizar bien a qué se refieren y si en verdad existiría un impacto. Por otro lado tenemos a los grandes grupos de empresas, que pueden aprovechar la “consolidación fiscal” para pagar menos impuestos “en conjunto”. Me parece que regular de forma más adecuada éste tipo de regímenes podría ser positivo, si se establecen reglas claras ya que, como muchas leyes mexicanas, las relacionadas con el pago de impuestos suelen tener muchas imprecisiones y por lo tanto interpretaciones.

Personas físicas y sus deducciones

De acuerdo con la reforma hacendaria se busca limitar el monto de las deducciones que se presentan. ¿Por qué? Podría suponer que se está aceptando que muchos de estos gastos no serían aplicables o son falsos. ¿Cuál es el motivo para considerarlo? Si las reglas para las deducciones fueran claras y simples en teoría  no habría problema para distinguir las que aplicarían y las que no. En todo caso el SAT tiene departamentos de auditoría que se encargan de revisar. No creo que se pueda establecer un porcentaje ligado a los ingresos, como aparentemente se intenta, que corresponda verdaderamente a los gastos de una persona física. Todo dependerá de a qué se dedique y cuál sea su utilidad, control de gastos, etc. Me parece irresponsable sugerir una medida tan arbitraria.

Coca, cerveza y alcohol.

¿Sabías que ya pagas IVA sobre jugos y agua en presentación menor a 10 litros? Considerando que un jugo es mucho más nutritivo que una Coca me parece absurdo. Creo que no hay muchas quejas sobre este punto de poner impuestos especiales a bebidas saborizadas. ¿Y sobre las chelas y las cubas? Según la reforma los impuestos se quedarían igual, entonces no veo el caso a entrar en quejas.

Educación privada

¡Vaya tema! La educación en México es un tema no sólo importante, sino conflictivo. Refiriéndome únicamente a la intención de incorporar el IVA a servicios educativos privados, mi pregunta es ¿Cuál es supone que es la alternativa? La educación también es un derecho contemplado en la constitución, supuestamente provista por el estado de forma gratuita. Si quiero que mi hijo tenga educación particular tendré que pagar, ¿pero además pagar impuestos? No estoy de acuerdo. ¿Por qué no se regulan algunas prácticas de escuelas particulares de cuotas adicionales por familia, listas de útiles carísimos, cobro por gastos de ‘material’, en fin? O que se especifique que así como se paga el IVA podrá ser considerado como deducible (y sujeto de devolución) cuando se presenta la declaración, así aunque lo pagues en un momento tendrían que devolverlo. ¿Qué necesidad de complicar más el sistema?

Chicles

Dejé este punto al final porque me parece el más gracioso. ¿Es en serio un golpe a la economía familiar o personal el pago de IVA en los chicles? Si estás comprando unos chicles nada baratos de alrededor de 13 pesos, los 2 pesos de IVA que corresponderían estaban destinados a algo vital seguramente. Si de por sí es risible que se haya puesto especial atención en si se agrega IVA o no a los chicles… me parece especialmente absurdo que haya quienes expresan quejas y críticas a este punto particular de la propuesta de reforma.

Hay otros puntos por comentar, cierto; otras situaciones a tomar en cuenta, sin duda. La intención es expresar una opinión que es muy personal y que también es el resultado de la reflexión, experiencia y hasta un poco de investigación. No espero que todos estén de acuerdo, incluso me gustaría conocer otras opiniones con información. Las opiniones pueden cambiar y los puntos de vista enriquecen. Ojalá siga la tendencia a opinar y expresarse en redes sociales y por cualquier medio, y ojalá también aprendamos a hacerlo con responsabilidad e introspección.

miércoles, 27 de marzo de 2013

En lo próspero y en lo adverso

Las relaciones de hoy suelen ser muy diferentes a las que vivió la generación anterior. Independientemente de si vives en un lugar conservador, si tienes una familia que tiende a lo tradicional o si eres un espíritu libre, normalmente nos encontramos rodeados de todo tipo de casos en lo que a parejas se refiere.

Aclaro este punto ya que el título de hoy, si bien tomado del discurso clásico del matrimonio, es en teoría, un entendido de cualquier relación de pareja, y aunque sus alcances varían, las diferencias provienen precisamente del tipo de relación que se trate.

No, no soy ninguna experta, pero respondo a la necesidad de expresarme en este punto.
¿Quién nos dijo que había que exagerar la idea de la prosperidad o de la adversidad? Es cierto que los mejores ejemplos son los extremos, pero la referencia constante a estos ejemplos únicamente desvía nuestras expectativas de la realidad en que vivimos.
La prosperidad, definida como bienestar, es un estado positivo que puede ser muy sutil, al igual que la adversidad en sentido contrario. Tal vez en ese misterio de ligeros altos y bajos está el conflicto de las relaciones, porque es justo lo sutil o pequeño lo que suele ser omitido. Las obras de ficción muchas veces exponen situaciones excesivas, como "dar la vida", vivir en condiciones paupérrimas, perdones de errores extremos. Las mareas de la existencia suelen ser más tenues, y es en las más mínimas y a veces frecuentes reacciones donde veo, a menudo, esa falta de entendimiento de "en lo próspero y en lo adverso". No espero que signifique "de ser millonarios a estar en la calle", porque implica precisamente los nada escasos matices que existen entre estos cabos. Espero que sea una palabra amable si las cosas no van bien, una actitud dispuesta si existe una necesidad o petición, una felicitación ante un logro por pequeño que sea, incluso una llamada de atención adecuada que nos haga ser mejores.

Supongo que precisamente por eso es difícil, porque creemos que la eternidad es la máxima expresión de entrega y amor, cuando muy probablemente esté en cada día.